Pero el sábado Abel y yo nos hicimos una rutilla muy maja. El año pasado ya la hicimos comenzando en Montejo de la Vega pero en esta ocasión lo haremos desde Maderuelo, pueblo por el que no pasamos el pasado año, por lo que esta vez variaremos algo el recorrido.
Comenzamos desde lo alto de este pueblo medieval bajando para cruzar por el puente sobre el embalse de Linares y coger el camino que sale de frente en ligera ascensión. Así comenzamos a calentar las piernas ya que el día no es caluroso, tampoco frío, yo diría que nos hizo un día perfecto y sin nada de viento.
Volvemos a cruzar la carretera y cogemos el camino que bordea el pantano... al poco tiempo tenemos los neumáticos rebozados en barro, el cambio atascado... en fin... que por unos momento pensamos en que sin apenas empezar, nos vamos a tener que volver a casa... pero ¿y si nos pasa esto en el camino de Santiago?... nada, hay que tirar como sea para alante.
Volvemos a cruzar la carretera y cogemos el camino que bordea el pantano... al poco tiempo tenemos los neumáticos rebozados en barro, el cambio atascado... en fin... que por unos momento pensamos en que sin apenas empezar, nos vamos a tener que volver a casa... pero ¿y si nos pasa esto en el camino de Santiago?... nada, hay que tirar como sea para alante.
Nos toca limpiar con unos palos y empujar unos cientos de metros hasta que por fin llegamos a una zona donde podemos montar de nuevo. Salimos al asfalto camino de la presa esperando que el terreno que nos espera en el resto de la ruta no se parezca en nada al que acabamos de dejar atrás.
Y así es! y el tramo de las hoces esta espectacular.
Desde la ermita de Casuar subiremos por un sendero en el que tenemos que empujar la bici, pero merece la pena por las vistas que tendremos desde lo alto. El año pasado seguimos por pista desconociendo esta alternativa, que nos llevara por un sendero de bajada muy divertido hasta la entrada del parque.
Desde aquí llegamos a Montejo y un tramo de carretera en continua subida nos espera para llegar a Valdevacas donde subimos al mirador que hay en el punto mas alto del pueblo.
De allí al área recreativa de Hornuez, lo hacemos por la misma pista que el pasado año y desde ahí a Maderuelo seguimos una pista que nos vuelve a sorprender gratamente.
Otra alternativa para conocer las hoces del río Riaza. Yo diría que incluso mas bonita que la que ya conocíamos. El único punto negro, ese tramo de barro pegajoso.
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